Las regiones de máxima sensibilidad del oído humano puede ser modeladas como las resonancias de tubo cerrado del conducto auditivo. El pico observado a aproximadamente 3700 Hz a la temperatura corporal, corresponde a una longitud de tubo de 2,4 cm. El pico de frecuencia de mayor sensibilidad está a unos 13 kHz, lo cual es algo superior al calculado para el tercer armónico de un cilindro cerrado.
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